lunes, 8 de mayo de 2017

Día Internacional de la Cruz Roja

Día Internacional de la Cruz RojaEl Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, comúnmente conocido como Cruz Roja o Media Luna Roja, es un movimiento humanitario mundial, cuya misión principal es  “inspirar, estimular, facilitar y promover todas las formas de actividades humanitarias, con el fin de aliviar el sufrimiento humano y la Prevención, y contribuir así al mantenimiento y promoción de la dignidad humana y la paz en el mundo.
Aunque esa institución fue fundada el 17 de febrero de 1863, el día Mundial de la Cruz Roja y la Media Luna Roja se celebra el 8 de Mayo en honor al natalicio de su fundador, Jean Henri Dunant, quien se preocupó al ver el mal servicio médico brindado a los militares y la agonía que sufrían lo heridos durante la batalla de Solferino (Italia), que enfrentaba a franceses con austriacos.
Dunant concebía las sociedades como entes neutrales, dispuestos a prestar ayuda humanitaria a quien la necesitara, independientemente de su raza, nacionalidad o creencias. Su idea la recogieron cuatro miembros de la Sociedad Ginebrina de Utilidad Pública que, junto con él, impulsaron el proyecto hasta la constitución formal en 1863 del Comité Internacional de la Cruz Roja.
Esta institución, que tiene sede en Ginebra (Suiza), lugar natal de su fundador; desarrolla programas de ayuda para atender a todas aquellas personas que los necesitan y  carecen de recursos. Como auxiliar del Estado en el ámbito humanitario tiene funciones acordes a las necesidades del país o responsabilidades que otorgan los Estados, y estas son: promoción de los principios fundamentales y valores humanitarios, intervención en casos de desastre, preparación para desastres y mejora de los servicios de salud en la comunidad.
Cruz Roja Dominicana
La Cruz Roja Dominicana fundada el 15 de Agosto del 1927. Es constituida de acuerdo con los convenios de Ginebra de los cuales República Dominicana es parte, así como con los Principios Fundamentales del Movimiento.
Esta organización criolla fue reconocida por el Comité Internacional de la Cruz Roja el 16 de noviembre de 1927, siendo admitida como miembro de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y Media Luna Roja, el 19 de enero del 1931.
La Sociedad Nacional de la Cruz Roja Dominicana es valorada por el Estado dominicano como una organización autónoma y de derecho privado de carácter internacional, auxiliar de los poderes públicos en las actividades humanitarias.
Trabajo voluntario
El trabajo voluntario ha sido parte del Movimiento de la Media Luna Roja de la Cruz Roja desde sus inicios. En 1859, el joven Henry Dunant se convirtió en el primer gerente de voluntarios del Movimiento, mediante la organización de voluntarios locales para ayudar a los heridos y moribundos que yacían abandonados por sus propias fuerzas. Por primera vez en Europa,  los heridos fueron tratados con imparcialidad, independientemente del lado en que lucharon.
Actualmente, hay un registro de 17 millones de voluntarios activos, los cuales juegan un papel esencial  apoyando sus comunidades a lo largo del mundo realizando labores de distribución de alimentos a familias necesitadas, operaciones de socorro en situaciones de emergencia, reconstrucción de viviendas destruidas por catástrofes naturales, construcción de escuelas y operaciones de cooperación internacional. Por estas razones, la familia OPTIC reconoce la desinteresada labor que estos héroes realizan cada día.

jueves, 30 de marzo de 2017

Batalla del 30 de marzo de 1844

La batalla del 30 de marzo de 1844 consolidó nuestra Independencia Nacional, en esta ocasión te ofrecemos un artículo con su evaluación para que compruebes lo aprendido sobre el tema.

Antes de la batalla
Para la batalla del 30 marzo que se produjo en Santiago en el año 1844, los patriotas dominicanos realizaron un proceso de preparación que consistió en obtener dinero para la compra de armas.
Con estos fines la ayuda de Ramón Matías Mella y Pedro de Mena fue muy importante, ya que lograron donativos de muchas personas pudientes de la ciudad. En Santiago, Ciprián Mayol, Juan Luis Bidó, Ramón Bidó y otros dominicanos ayudaron con recursos económicos.
Para esta batalla, la segunda librada luego de la proclama de la independencia nacional el 27 de febrero de ese año, comenzaron a llegar refuerzos desde Baní al mando del coronel Ramón Santana.
Francisco Antonio Salcedo avanzaría hasta encontrarse con los haitianos en Talanquera y Escalante, con el propósito de contener el avance hacia Santiago. Este militar estableció su cuartel general en Escalante, cerca de Dajabón.
Las tropas de Pierrot avanzaron rápidamente y éste tomó a Dajabón el 23 de marzo de 1844. En Santiago existía un clima de terror, a lo que se sumaba la situación creada con la retirada de los ejércitos de Pedro Santana.
Ramón Matías Mella colaboró mucho en la organización de la defensa en San José de Las Matas. Con el riesgo de perder la vida, un comerciante llamado Theodore Stanley Heneken, avisó a las autoridades de Santiago de los Caballeros, sobre la proximidad de la invasión. Conversó con Ramón Matías Mella y le detalló el plan que tenían los haitianos.
El 27 de marzo de 1844, fue llamado por la Junta de Gobierno dominicano el general José María Imbert se hizo acompañar de los oficiales Pedro Eugenio Pelletier, jefe de la línea principal, Archielle Michell, encargado de la Defensa del Fuerte Libertad, el comandante Ángel Reyes, los coroneles Ramón Franco Bidó, José Nicolás Gómez, Fernando Valerio López, los Artilleros José M. López, Lorenzo Mieses, Dionisio Mieses, José Gómez Mallot, Toribio Ramírez, Marcos Trinidad López, entre otros.
Antes de la batalla, Imbert hizo un manejo adecuado del terreno donde se iba a combatir.
El 29 de marzo, al atardecer, el general Pierrot dividió sus tropas. Se acercó a la ciudad de Santiago de los Caballeros con más de 2,000 soldados en cada columna. Antes del amanecer entró a la ciudad un desfile militar de música por el Fuerte Libertad. Las tropas invasoras se atrincheraron en Gurabito.
Una parte de las tropas dirigidas por José María Imbert aguardaron en el fuerte "Dios, Patria y Libertad", frente a la sabana de Santiago de los Caballeros.
Inicio de la batalla
Luego de las tropas de Imbert atrincherarse a la derecha del río Yaque del Norte se dirigió hacia el camino de La Herradura. El enemigo atacó y fue embestido por este en el fuerte "Dios, Patria y Libertad" frente a la sabana de Santiago de los Caballeros.
Los haitianos contraatacaron y fueron rechazados por la artillería dominicana y la fusilería de Fernando Valerio López.
Los haitianos lanzaron un ataque desesperado y fueron vencidos con los cañones del fuerte "Dios, Patria y Libertad" y por la infantería de Fernando Valerio López.
El grupo de los Andulleros de Fernando Valerio López jugó un papel muy importante en el triunfo de los dominicanos, pues aunque muchos de éstos soldados murieron con sus lanzas en las manos, los demás no se amedrentaron y continuaron la lucha.
El general José María Imbert afirmó lo siguiente: "Nuestra artillería le mató tanta gente que renunció a nuevos esfuerzos por este lado del Fuerte Libertad" El enemigo se vio obligado a reconcentrarse en la Sabana. No obstante este triunfo, el enemigo no se dio por vencido y continuó en sus planes de invasión.
Este triunfo fue muy importante para los dominicanos, quienes reafirmaron su fe en la Independencia Nacional lograda el 27 de febrero de 1844.

viernes, 3 de febrero de 2017

José Ramón López

 Escritores Dominicanos 



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José Ramón López (1886-1922). Nació en Montecristi el 3 de febrero de 1866. Cuentista, periodista y educador. Desde muy niño sus padres lo llevaron a vivir a Puerto Plata, donde tuvo que trabajar durante su niñez y adolescencia para aliviar la situación económica familiar. Al mismo tiempo que laboraba en oficios tan disímiles como distribuidor de periódicos o aprendiz de impresor, asistía a la escuela primaria y secundaria. No hizo estudios universitarios. Su oposición a la dictadura de Ulises Heureaux, a quien atacó desde las páginas del periódico El Renovador, le costó la cárcel en 1884. En 1885, después de otro apresamiento, se marchó a Puerto Rico y, posteriormente, a Venezuela a un exilio involuntario que se extendió hasta 1887. En Venezuela trabajó como redactor de los periódicos El Tiempo y El Progreso y en República Dominicana fue director de El Dominicano (1909), fundador de El Nacional (1911), redactor de Pluma y Espada (1909) y colaborador del Listín Diario y El Teléfono. Como servidor público ocupó las posiciones de Director la Escuela Normal de Montecristi, Director de Estadística y Senador de la República.  Se distinguió entre los escritores de su generación, por la sagacidad con que estudió los fenómenos característicos de la evolución dominicana. En su ensayo "La paz en la República Dominicana, a la luz de la historia y de las ciencias naturales, el fenómeno de las guerras civiles, para llegar a la conclusión de que esos brotes anárquicos obedecieron a factores de orden económico más bien que a defectos orgánicos de raza que afecten la psicología nacional.
Entre los rasgos que caracterizan lo que él denominó nuestra formación gregaria, incluye José Ramón López la extinción de los prejuicios raciales. En "La alimentación y las razas", el segundo de sus grandes ensayos sobre la realidad nacional, recurre a la psicología para explicar ciertos fenómenos propios de la vida social dominicana.
José Ramón López cultivó el cuento y la novela. En "Nicia", narración corta que editó en 1904, y en fragmentos de "Dolores", novela que dejo inconclusa y algunos de cuyos capítulos dio a conocer en al revista "El lápiz", describe con sencillez el ambiente dominicano durante la época de nuestras discordias intestinas.
Su habilidad para captar la sensibilidad política nacional, mediante el uso de un lenguaje claro, sencillo y anecdótico, así como su talento y su espíritu emprendedor lo convirtieron en el periodista más innovador de su época y en uno de los cuentistas dominicanos más importantes del siglo XIX. También está considerado como unos de más lúcidos pioneros del ensayo histórico y sociológico dominicano. Murió en Santo Domingo el 2 de agosto del 1922.

BIBLIOGRAFIA PASIVA

CUENTO. Cuentos puertoplateños. Santo Domingo: Imprenta La Cuna de América, 1904.

NOVELA. Nisia. Santo Domingo: Imprenta La Cuna de América, 1898.

ENSAYO. La alimentación y las razas. Santo Domingo: Imprenta García Hermanos, 1896. La República Dominicana. Santo Domingo: s.n., 1906. Geografía de la América y en particular de la República Dominicana. Santo Domingo: Editora Francisco A. Palau, 1915. La paz en la República Dominicana. Contribución al estudio de la sociología nacional. Santo Domingo: Tipografía El Progreso, 1915. Censo y catastro en la común de Santo Domingo. Santo Domingo: Tipografía El Progreso, 1919. Manual de agricultura. Santo Domingo: Imprenta Palau, 1920. El gran pesimismo dominicano. Santiago de los Caballeros: Universidad Católica Madre y Maestra, 1975.