viernes, 27 de febrero de 2015

Historia de la Independencia Nacional Dominicana

Historia de la Independencia Nacional Dominicana

La República Dominicana declara su Independencia de la dominación haitiana el 27 de Febrero de 1844 y se constituye como un estado independiente. 

Domininación Haitiana 

La parte española de la isla fue invadida por la naciente República de Haití por razones de tipo económicas, sociales y políticas siendo la de mayor importancia la preservación de su propia independencia frente a un vecino que mantenía el sistema esclavista y que por sus propios intereses era un potencial enemigo de la recién creada república negra, en la que había sido abolida la esclavitud. 

La invasión se produce casi sin ninguna oposición militar dada la diferencia numérica de ambos lados. La parte este o española tenía una población inferior al pueblo haitiano de esa época, además de la desorganización y miseria producto de la Guerra de la Reconquista en la parte española. Por otra parte, España estaba en franca decadencia y enfrentando los movimientos independentistas en el territorio continental y había perdido el interés por esta posesión cuyas minas de oro ya estaban agotadas. 

La ocupación haitiana de la parte oriental de la isla que duró 22 años. Esta ocupación, que pretendía anexar el territorio oriental a Haití, produjo inmediatamente un gran malestar y repulsa en los habitantes españoles dado sus irreconciliables diferencias de idioma, cultura, religión y su organización política, pero sobre todo por su concepción diferente del derecho de propiedad de la tierra. 

Movimientos separatistas 

La ocupación generó resistencia, desobediencia civil e incluso algunas conspiraciones que fueron develadas y hechos prisioneros o condenados a muerte sus miembros en un régimen que representaba cada día más el oprobio natural de una dominación extranjera. 

La Trinitaria 

En 1838 y después de regresar de estudiar en Europa y convencido por los vientos del Liberalismo que azotaban el viejo continente, Juan Pablo Duartefunda la organización secreta La Trinitaria cuya meta fue la creación de una Patria independiente de toda dominación extranjera. 

La Trinitaria creció rápidamente dentro de la juventud y se extendió a las principales ciudades del país producto del trabajo tesonero y también como resultado de una sociedad artística llamada La Filantrópica que por medio de obras de teatro iba llevando el mensaje independentista. 

Cuando el Presidente Boyer es derrocado por un movimiento revolucionario haitiano, se presentan coyunturas que precipitan los acontecimientos en la parte oriental de la isla firmemente decidida a terminar con el yugo opresor. 

En ese momento existían cuatro movimientos separatistas como nos menciona Frank Moya Pons en su Manual de Historia: 
  1. El movimiento independentista encabezado por Juan Pablo Duarte
  2. Movimiento pro-español, del cual eran exponentes en Santo Domingo los sacerdotes Gaspar Hernández y Pedro Pamiés, y en Puerto Plata el veterano General Andrés López Villanueva.
  3. Movimiento pro-ingles, se inclinaba a buscar la protección de Inglaterra a cambio de ventajas comerciales y lo encabezaba un propietario de Las Matas de Farfán de apellido Pimentel.
  4. Los Afrancesados:  compuesto por hombres maduros, la mayor parte de los cuales habían ocupado puestos administrativos dentro del gobierno haitiano anterior y que creían poder alcanzar la eliminación del dominio haitiano con ayuda de Francia, (los afrancesados) a cambio de otorgarle a esta potencia privilegios políticos, arancelarios y territoriales. Sus cabecillas visibles eran un rico propietario de Azua llamado Buenaventura Báez (que luego se convirtió en dictador) y el importante abogado y comerciante Manuel Joaquín Delmonte.
El Gobierno provisional haitiano ordenó que se realizaran elecciones municipales el día 15 de Junio de 1843, elecciones que fueron ganadas en su mayoría por los miembros de la Trinitaria en el sector oriental, victoria que agudizaría la lucha contra la dominación haitiana e hizo que el General Gérard o Herard con sus tropas iniciara la persecución de los trinitarios en todo el país, obligando a Duarte a embarcarse subrepticiamente hacia Saint Thomas para evadir dicha persecución. 

El movimiento quedó bajo la dirección de Francisco del Rosario Sánchez y buscando lograr nuevos adeptos lograron “conquistar” para la causa a Tomás Bobadilla, antiguo funcionario del régimen de Boyer que el nuevo gobierno haitiano había dejado fuera. También conquistaron los hateros del este del país, un grupo de personas privilegiadas por la colonia mediante la entrega de grandes cantidades de tierra y sus lideres eran los hermanos Pedro y Ramón Santana. 

Declaración de Independencia 

Aunque Juan Pablo Duarte, el Padre de la Patria, se hallaba ausente, la noche del martes 27 de febrero de 1844, en la Puerta del Conde de la ciudad de Santo Domingo, la República Dominicana era proclamada por Francisco del Rosario Sánchez, jefe del movimiento tras la ausencia de Duarte, Tomás Bobadilla y Briones, representante de los conservadores, Ramón Matías Mella, Manuel Jiménez, Vicente Celestino Duarte, José Joaquín Puello, Gabino Puello, Eusebio Puello, Eduardo Abreu, Juan Alejandro Acosta, Remigio del Castillo, Jacinto de la Concha, Tomás de la Concha, Cayetano Rodríguez, Félix María del Monte y otros patriotas, quienes expresarían a a las autoridades haitianas su indestructible resolución de ser libres e independientes, a costa de nuestras vidas y nuestros intereses, sin que ninguna amenaza sea capaz de retractar nuestra voluntad. 

Ese 27 de febrero se izó la Bandera Dominicana en la Puerta del Conde. Ondeó en la ciudad de Santo Domingo la bandera bordada por Concepción Bona y María Trinidad Sánchez, junto con otras damas. La Bandera había surgido de un proyecto presentado por Juan Pablo Duarte, aprobado el 16 de julio de 1838 en La Trinitaria, donde se presentaron los colores y la forma de la enseña que representaría al nuevo estado, que se denominaría "República Dominicana". 

La naciente república quedó dirigida por una Junta Central Gubernativa bajo el poder de los conservadores hasta el 14 de noviembre de 1844 en que Pedro Santana es electo como el Primer Presidente Constitucional de la República Dominicana. 

miércoles, 25 de febrero de 2015

Matías Ramón Mella

Ramon Matias Mella.jpgMatías Ramón Mella Castillo (Santo Domingo, 25 de febrero de 1816 - Santiago, 4 de junio de 1864) fue unmilitarpolítico y activista dominicano. Es considerado uno de los Padres de la Patria de la República Dominicanajunto a Juan Pablo Duarte y Francisco del Rosario Sánchez.
Como miembro del movimiento independentista, Mella encarnó la expresión militante y decidida, siendo conocido por haber disparado su trabuco la noche del 27 de febrero de 1844 en la Puerta de la Misericordia, que dio comienzo de esta forma a la revuelta por la independencia del país.
De los fundadores de la República, Mella fue el más apto para las actividades militares. Su habilidad como estrategacontribuyó significativamente a lograr la independencia dominicana, hecho que puso fin a la ocupación haitiana.
Más tarde, se incorporó al movimiento restaurador contra la anexión a España, realizada por el terrateniente Pedro Santana en 1861. Fue vicepresidente del país entre 1863-1864.

Familia y primeros años

Mella nació el 25 de febrero de 1816 en Santo Domingo, hijo de Francisca Castillo y Antonio Mella Álvarez.
En 1835, en plena dominación haitiana, fue nombrado "Preposé", o encargado de la comunidad de San Cristóbal . Allí se dedicó al negocio del corte de madera, actividad de la que también se ocupaba Antonio Duvergé, lo que hace suponer que ambos líderes se conocieron entonces. Mella era hábil con el sable y la espada.
Hacia 1836, contando veinte años de edad, Mella contrajo matrimonio con Josefa Brea, quien pertenecía a una familia importante del país y con quien procreó 4 hijos: Ramón Matías, Dominga América María, Antonio Nicanor e Ildefonso. Según un testamento del 5 de mayo de 1859, ninguno de los dos aportó grandes bienes al matrimonio. Al parecer adquirió sus bienes y propiedades estando casado, parte de ellos por vía hereditaria tras el fallecimiento de su padre en febrero de 1837.

Vida política y militar

El 1 de marzo de 1844 se integró como miembro de la recién creada Junta Gubernativa Provisional durante la Primera República y pocos días después partió para el Cibao, donde asumió el cargo de gobernador de Santiago y delegado de la Junta Central Gubernativa, convirtiéndose en el jefe político y militar de la región más importante del país. Ostentó el rango de General del Ejército Nacional e hizo venir a José María Imbert desde Moca, quien lo auxilió como "mano derecha" en el mando militar.
Al dar comienzo la Batalla de Santiago, Mella, que no se encontraba en el campo de batalla, impartió las primeras instrucciones y escogió a Imbert como lugarteniente.
Cuando Faustin Soulouque invadió el país, Mella se incorporó al ejército, destacándose en la Batalla de Las Carreras, y pasó a ser secretario de Pedro Santana. Luego de la renuncia del presidente Manuel Jimenes y la elección de Buenaventura Báez como presidente, en septiembre de 1849, Mella fue nombrado Secretario de Estado de Hacienda y Comercio.
Al surgir la enemistad entre Santana y Báez, Mella decidió seguir al lado del primero. Sin embargo, la obstinación de Santana por querer anexar el país a España los enemistó para siempre. Entre 1849 y 1861, Mella rechazó a Santana y su proyecto de anexión.
Mella desempeñó los cargos de Comandante de Armas, Ministro de la Guerra, Gobernador de Santiago, Ministro Plenipotenciario y Enviado Extraordinario en Misión Especial frente al Gobierno español. En julio de 1856 se le encomendó preparar un proyecto de ley para organizar el ejército.

Miembro de La Trinitaria

Aunque no se sabe cuándo conoció a Duarte, una vez fundada La Trinitaria, se adhirió a ella en calidad de miembro mediante un comunicado, junto a Sánchez y Félix María del Monte. Duarte vio en Mella un discípulo de condiciones excepcionales y lo designó como sustituto de Juan Nepomuceno Ravelo cuando éste fracasó en las gestiones de llegar a un acuerdo con los dirigentes haitianos con la finalidad de organizar el movimiento de "La Reforma".

Guerra de independencia

En enero de 1843 fue comisionado por Duarte para trasladarse a la villa haitiana de Los Cayos de San Luis, al sur de la isla, para tomar contacto con los revolucionarios reformistas adversos al presidente Boyer.
Convocó e hizo posible una alianza entre los trinitarios y los reformistas haitianos que combatían a Boyer. Esto trajo como consecuencia, el 16 de enero de 1844, que se firmara el acta de separación, que proclamó la necesidad de separarse de la opresión haitiana y oficializó la unión de liberales y conservadores. Durante la guerra de independencia ocupó la región norte para impedir la penetración haitiana.

Guerra por la Restauración

Una vez declarada la independencia, Mella proclamó a Duarte presidente de la Junta Central Gubernativa con la finalidad de evitar que algún partidario delcolonialismo ocupara el poder. Esta actitud provocó que Pedro Santana lo expulsara del país.
Mella regresó al país en 1848 amparado en la amnistía del presidente Manuel Jimenes y se unió a los conservadores liderados por Pedro Santana, hasta que en 1861, ya ante la eminente anexión a España, se adhirió a los restauradores.
En agosto de 1863 viajó al sur, atravesando la Cordillera Central por Constanza, con el encargo de organizar las tropas restauradoras dirigidas por Pedro Florentino. Durante la restauración fue designado Ministro de la Guerra y elaboró un manual de guerra de guerrillas en enero de 1864.

Muerte

Mella se desempeñaba como vicepresidente de la República Dominicana cuando, en pleno Grito de Capotillo, enfermó de disentería. Poco antes de morir pidió que sus restos fueran envueltos en la Bandera Nacional y pronunció estas palabras: “Aún hay patria, viva la República Dominicana”.
Murió el 4 de junio de 1864, en extrema pobreza, en una pequeña casa cercana a la Fortaleza San Luis, en Santiago, siendo enterrado cubierto por la bandera dominicana como fuera su deseo. Sus restos se encuentran, junto a los de Duarte y Sánchez, en el Altar de la Patria. De las tres grandes figuras próceres del siglo XIX, fundadores de la República, Matías Ramón Mella representó la expresión militante y decidida y el más adaptado a las actividades políticas de una sociedad precapitalista.

lunes, 23 de febrero de 2015

Día Internacional de la Lengua Materna

UNESCO Tag der Muttersprache 2010.png
El Día Internacional de la Lengua Materna fue proclamado por la Unesco el 21 de febrero de 2000, y se celebra en la misma fecha cada año en los Estados miembros y en la sede de la organización para promover la diversidad lingüística y cultural y el plurilingüismo.

Este día está dedicado al reconocimiento del Movimiento por la Lengua Bengalí, que conmemoró en Bangladés el Día del Movimiento por la Lengua desde 1952, cuando la policía y el ejército del Estado pakistaní, que entonces ocupaba Bangladesh, abrieron fuego contra la multitud hablantes de lengua bengalí que se manifestaban por susderechos lingüísticos en DhakaBangladés.
Historia
En 2015 se cumple el 15º aniversario del Día Internacional de la Lengua Materna; es también un año decisivo para la comunidad internacional, por ser el plazo fijado para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenioy el momento en que los países definirán una nueva agenda de desarrollo sostenible.
La agenda despuésde 2015 debe centrarse en la prioridad de promover la educación para todos: ampliar el acceso, garantizar la igualdad y la inclusión y fomentar la educación para la ciudadanía mundial y el desarrollo sostenible. Impartir la educación en la lengua materna es esencial para alcanzar estos objetivos–facilitar el aprendizaje y reforzar las competencias en materia de lectoescritura y aritmética.Para progresar en estos ámbitos es necesario dar más importancia a la formación docente, la revisión de los programas de enseñanza y la creación de entornos propicios para el aprendizaje.
La UNESCO impulsa estos objetivos en todo el mundo. En América Latina, con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, la UNESCO fomenta la educación inclusiva por medio de métodos interculturales bilingües, para dar cabida tanto a las culturas nativas como a las que no lo son. La educación en la lengua materna no solo favorece la educación de calidad sino que además es esencial para consolidar el plurilingüismo y el respeto de la diversidad lingüística y cultural en sociedades que se transforman rápidamente.

En 1999 la Conferencia General aprobó la resolución con 37 recomendaciones de medidas para promover elmultilingüismo, en particular mediante la promoción del acceso universal al ciberespacio y el multiculturalismo en las redes mundiales de información.
En 2000 se celebra por primera vez el Día Internacional de la lengua materna; en un mensaje leído durante la ceremonia, el Secretario General de la ONUKofi Annan, apoyó la celebración ya que ésta crea conciencia en todos los pueblos sobre el valor de las lenguas. Reafirmando la importancia de preservar la diversidad de las lenguas, Kofi Annan pidió mayores esfuerzos para preservar las lenguas como un patrimonio común de la humanidad.
La celebración del Día Internacional de la lengua materna en 2000, 2001, 2002 y 2003 han sido a través de discursos e intercambio de ideas dirigido por académicos, lingüistas, funcionarios gubernamentales, sociedades culturales y otros representantes de los Estados miembros sobre aspectos de la cultura, la educación y los idiomas.
En todo el mundo se celebraron muchas actividades culturales locales tales como lectura de poesía en las escuelas, exposiciones y obras de teatro, emitiéndose además programas de radio y televisión producidos por medios de comunicación locales y nacionales.

lunes, 9 de febrero de 2015

Ulises Espaillat

(Ulises Francisco Espaillat; Santiago de los Caballeros, 1823 - 1878) Político dominicano que alcanzó la presidencia de la República en 1876. Farmacéutico de profesión, su orientación política se encaminó desde la juventud a la defensa de los ideales independentistas dominicanos y a la lucha por el progreso colectivo de su comunidad.

Ulises Espaillat participó activamente en la revolución de julio de 1857, que forzó la caída del gobierno de Buenaventura Báez y el regreso a la presidencia de Pedro Santana. También formó parte de las fuerzas que lucharon contra la dominación española de la isla. Se opuso a la anexión a España decretada por Santana, y luchó junto a José María Cabral y Gregorio Luperón en la guerra de Restauración (1861-1865). Su aportación, tanto económica como intelectual, fue determinante para el triunfo de la plena restauración de la República en 1866.
A lo largo de su trayectoria institucional ocupó el cargo de ministro de Interior y Policía en el gobierno provisional de José Desiderio Valverde (1858), la presidencia de la comisión de Relaciones Exteriores en el gabinete de Pepillo Salcedo (septiembre de 1863 - octubre de 1864), la vicepresidencia de la República durante el régimen de Gaspar Polanco (octubre de 1864 - enero de 1865) y la cartera de Justicia, Instrucción Pública y Relaciones Exteriores bajo la presidencia de José María Cabral entre 1866 y 1868. Finalmente, el 29 de abril de 1876 asumió la presidencia del país con un fuerte apoyo popular.
En el ejercicio de su breve mandato hizo gala de un talante político poco habitual en la época y trató de gobernar según los dictados constitucionales y democráticos, rodeándose de los hombres más capaces de la nación, al margen de sus adscripciones políticas. Empeñado en moralizar la administración pública, empezó por rebajar su sueldo y el de los altos funcionarios, se negó a firmar decretos de muerte, respetó la prensa y regularizó las erogaciones del gobierno. Introdujo con todo ello un modelo de gobierno poco grato para altos cargos civiles y militares acostumbrados a recibir privilegios y prebendas del poder.

Biografia Jose Ramon Lopez

Sociedad Cultural Renovacion, Jose Ramon Lopez Nació en Montecristi el 3 de fe-brero de 1866. Cuentista, periodista y educador. Desde muy niño sus padres lo llevaron a vivir a Puerto Plata, donde tuvo que trabajar durante su niñez y adolescencia para aliviar la situación económica familiar. Al mismo tiempo que laboraba en oficios tan disímiles como distribuidor de periódicos o aprendiz de impresor, asistía a la escuela primaria y secundaria. No hizo estudios universitarios.

Su oposición a la dictadura de Ulises Heureaux, a quien atacó desde las páginas del periódico El Renovador, le costó la cárcel en 1884. En 1885, después de otro apresamiento, se marchó a Puerto Rico y, posteriormente, a Venezuela a un exilio in-voluntario que se extendió hasta 1887. En Venezuela trabajó como redactor de los periódicos El Tiempo y El Progreso y en República Dominicana fue director de El Dominicano (1909), fundador de El Nacional (1911), redactor de Pluma y Espada (1909) y colaborador del Listín Diario y el El Teléfono. Como servidor público ocupó las posiciones de Director la Escuela Normal de Montecristi, Director de Estadística y Senador de la República. Su habilidad para captar la sensibilidad política nacional, mediante el uso de un lenguaje claro, sencillo y anecdótico, así como su talento y su espíritu emprendedor lo convirtieron en el periodista más innovador de su época y en uno de los cuentistas dominicanos más importantes del siglo XIX. También está considerado como unos de más lúcidos pioneros del ensayo histórico y sociológico dominicano. Murió en Santo Domingo el 2 de agosto de 1922.